6. Profesionales de la educación

En definitiva, de lo que se trata en la intervención pedagógica, es de generar hechos y decisiones pedagógicas. En el sistema educativo se ejercen funciones, ocupaciones y actividades que cumplen las condiciones de procesos de toma de decisiones. Así, en el sistema educativo trabajan sociólogos, médicos, psicólogos y otros especialistas que, por el hecho de intervenir en el sistema como profesionales, pueden recibir con propiedad el nombre genérico de profesionales del sistema educativo, porque trabajan profesionalmente en el sistema. 

Además en el sistema educativo existe un grupo de profesionales cuya tarea es intervenir, realizando las funciones pedagógicas para las que fueron habilitados. Son los profesionales de la educación o los profesionales del sistema educativo en sentido restringido, por contraposición a los demás profesionales que trabajan en el sistema educativo

Para nosotros, además de profesionales del sistema educativo, en general, (de los que hablamos al principio de este apartado), se puede hablar de otro tipo de profesionales cuya tarea es intervenir realizando las funciones pedagógicas para las que están habilitados y, a diferencia de los anteriores, podríamos denominarlos profesionales de la educación.

Se puede hablar, por tanto, de profesionales dentro o respecto del sistema educativo, distinguiendo entre “profesionales del sistema” en sentido amplio y “profesionales del sistema” en sentido restringido, estos  últimos serían los “profesionales de la educación”. Estas dos expresiones tienen significados distintos. Si bien todo profesional de la educación es profesional del sistema educativo (en su condición más genérica), no todo profesional del sistema educativo es profesional de la educación, ya que el contenido fundamental o básico de la formación profesional de este último es siempre el conocimiento de la educación. Es decir, la condición de experto le viene dada por estar en posesión de diversas habilidades: conocimiento teórico, tecnológico y práctico de la educación; dominio de destrezas para ejercer como técnico de la educación; y, práctica de su intervención como especialista de la educación.

Desde la condición de experto, cabe la posibilidad de hablar de profesionales de la educación y de profesiones pedagógicas. Esto, evidentemente, no debe contradecir el hecho, ya apuntado, de que no toda persona que educa es un profesional de la educación, porque los profesionales de la educación ocupan un espacio laboral definido, compatible con la actuación de otros profesionales del sistema educativo y con la de otros agentes de la educación. Pero es precisamente el conocimiento especializado de la educación el que otorga la competencia de experto al profesional de las funciones pedagógicas.

En todo caso, no conviene olvidar que la defensa de la profesionalización como elemento estructural del sistema educativo, permite establecer dos modalidades básicas de profesionalización:

  • profesionalización en el sistema educativo (cómo identifica y forma profesionales el sistema: el sistema forma profesionales)
  • profesionalización del sistema educativo (cómo descansa el sistema en los profesionales para realizar la formación: el sistema se vale de profesionales para formar) (Touriñán, 1995, Revista de Ciencias de la Educación)

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